La decisión se aprobó, el pasado domingo 20 de noviembre, en un congreso del partido en Tel Aviv, confirmando la propuesta del nuevo líder del Laborismo, Amir Peretz.
Peretz, acusó al Gobierno de Sharón de empobrecer y humillar a los pobres y a los inmigrantes, y solicitó a los votantes de clase obrera del Likud, partido de Sharón hasta ahora, que voten al Laborismo para construir un «nuevo pacto social».