Oferta a Irán:

Tecnología sofisticada por cooperación

La Unión Europea está dispuesta a ofrecer a Irán la "tecnología más sofisticada" en materia de energía nuclear a cambio de que ese país restablezca la confianza de la comunidad internacional. "Estamos dispuestos a negociar (con Irán) un proyecto de cooperación con la tecnología mas sofisticada de la que disponemos para poder producir energía nuclear", declaró Javier Solana, el representante de la UE para política Exterior y de Seguridad.

Los ministros de Asuntos Exteriores del UE-3 (Francia, Reino Unido y Alemania), con el apoyo de Solana, informaron a sus colegas europeos sobre su plan de incentivos a Irán, que se complementa con medidas coercitivas en caso de que siga sin cumplir con las exigencias de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) .
«Esta cooperación incluirá elementos de tecnología nuclear, económicos y políticos», declaró en ronda de prensa la ministra de Asuntos Exteriores austriaca, Ursula Plassnik, cuyo país preside, este semestre, la UE.
La oferta europea se produce mientras continúan las negociaciones para que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte una resolución vinculante que obligue a Irán a acatar las demandas de la AIEA que reclama el cese de sus actividades de enriquecimiento de uranio, sospechadas de ser utilizadas con fines militares.
El paquete de medidas será presentado posiblemente en una reunión de representantes del Consejo de Seguridad -Rusia, China, Estados Unidos, Francia y el Reino Unido- en Londres, el próximo viernes 19 de mayo.
Hasta ahora China y Rusia se han opuesto a una resolución vinculante en la ONU, porque abriría el camino para la imposición de sanciones contra Irán. «Si la cuestión es la producción de energía, Irán puede estar seguro de que la propuesta europea será excepcional, pero si el objetivo es de otra naturaleza, quizás sea insuficiente», dijo ayer Solana.
Plassnik dijo que la UE «sigue comprometida con una solución diplomática», y recalcó que «el objetivo no es aumentar el aislamiento de Irán, sino buscar un modo de que vuelva a la vía de la negociación y de que restablezca la confianza».
En una declaración aprobada por los ministros, la UE «lamentó» la negativa de Irán a cumplir con las exigencias de la OIEA y llamó a Teherán a «suspender todas sus actividades de enriquecimiento, incluyendo la investigación y el desarrollo, así como la construcción de un reactor de agua pesada», para poder reanudar las negociaciones.
El Consejo de ministros señaló el «derecho de Irán al uso de la energía nuclear para fines pacíficos», y ofreció respaldar el desarrollo de un programa nuclear civil, sostenible y seguro si Teherán responde a las inquietudes internacionales y restablece la confianza en sus intenciones.
También expresaron la «profunda preocupación por la situación de los derechos humanos en Irán» y pidieron a sus autoridades que no penalicen a los ciudadanos que mantienen contactos con los europeos.