Declaraciones de funcionarios de los Estados Unidos:

“En Afganistán encontramos posters de las Cataratas y la Triple Frontera”

Cuando el 2004 no alcanza aún los dos meses de vida, insistentes declaraciones sobre la Triple Frontera confirman que los Estados Unidos convirtieron al punto de confluencia entre Argentina, Brasil y Paraguay (conocido como “La Triple Frontera”) en uno de sus objetivos militares.

Por Carmen Moreno

La presunta existencia de células terroristas conforma el pretexto para acceder en forma silenciosa y supuestamente justificable a la reserva de agua dulce más grande del planeta: el Acuífero Guaraní.
El propio coordinador de la oficina antiterrorista del Departamento de Estado norteamericano, Joseph Cofer Black, reconoció que el gobierno de George W. Bush está decidido a proseguir la intervención militar en la subregión.
Aunque sin otra opción que reconocer que “en este momento no conocemos de ninguna célula operativa de Al-Qaeda en la Triple Frontera”, Cofer Black estimó que “ha sido la vigilancia la que disuadió a los terroristas”.
Por su parte, el embajador de Estados Unidos en Asunción, John Keane, dijo que no es que allí vivan extremistas sino que se realizan actividades para financiar a grupos árabes.
Para estos funcionarios constituye prueba el hecho de que “cuando comenzamos la guerra contra el terrorismo en Afganistán y se hicieron incursiones en Kandahar y Kabul, se encontraron posters (afiches) de viaje que mostraban las zonas de las Cataratas (del Iguazú) y la Triple Frontera”.
Un informe elaborado por la Casa Blanca, y difundido por Internet, fue rechazado enfáticamente a mediados de enero por la Policía paraguaya que negó la existencia de peligro terrorista en la zona.
El comisario Celso Benítez restó veracidad al informe al señalar que están en constante contacto con los organismos antiterroristas de Brasil y Argentina, y que existe la certeza de que no hay presencia extremista en la región.
Benítez agregó que no existe tal peligro mencionado en el informe procedente de Washington, ocasión en que se aconseja a los ciudadanos de este país a no visitar Paraguay.
El jefe policial explicó que permanentemente se desarrollan trabajos de inteligencia, que no detectan ningún tipo de actividad terrorista, a la vez de asegurar que están listos para actuar cuando sea preciso.

Entrenamientos militares

El primer capítulo de este año en pos de la militarización tuvo lugar justamente en Paraguay, donde estadounidenses entrenaron a uniformados paraguayos en el control de focos terroristas.
Las maniobras estuvieron acompañadas de declaraciones que intentaron hacer creer que la minoría musulmana presente en la zona es propensa al terror.
Sin embargo, la celosa vigilancia a los presuntos sospechosos de terrorismo y la insistencia por colocar en medio de los tres países un puesto de monitoreo deja claro que los norteamericanos llegaron para quedarse.

Foro Social en Puerto Iguazú

Entretanto, la sociedad civil se prepara para el debate, la resistencia pacífica y las movilizaciones, cuyo ejemplo más cercano es el Foro Social que tendrá lugar en la ciudad argentina de Puerto Iguazú, en junio venidero.
Más de 50 organizaciones sociales de Brasil, Paraguay, Argentina, de otros países de América Latina y hasta de Estados Unidos, participaron en enero último en un encuentro para determinar la agenda del foro.
A favor del acuífero Guaraní, y en contra de militarización de triple frontera, serán los dos principales temas de la reunión, a la cual comprometieron su cooperación 72 Organizaciones No Gubernamentales y su participación unas 10 mil personas.
Los participantes aprovecharon la oportunidad para destacar como la zona fronteriza también funciona como llave de acceso político y militar a la región amazónica.
Se trata del área en la cual se ubica el río más caudaloso y largo del mundo: el Amazonas, donde los botánicos estiman que hay más de 125 mil plantas y una diversidad faunística integrada por varios millones de animales.
El bosque amazónico ayuda a regular la temperatura del planeta, consumiendo bióxido de carbono y produciendo oxígeno. Allí se encuentran más del 50% de los bosques tropicales del mundo y la quinta parte del total de agua dulce con que cuenta el planeta.
En el esquema de dominación, resaltaron analistas, la presencia norteamericana en la Triple Frontera es de carácter estratégico: desde allí podrán aplicarse controles a Argentina y Brasil (tras la victoria de fuerzas progresistas) y Paraguay (con fragilidad institucional y creciente movilización campesina).