Otra iniciativa rechazada

Netanyahu y su obstinada oposición a solucionar el conflicto

El periodista Barak Ravid publicó en el prestigioso diario Haaretz la primicia de que hace un año el primer ministro Bibi Netanyahu participó en una cumbre secreta en la ciudad de Aqaba, en Jordania, en la cual el entonces Secretario de Estado norteamericano, John Kerry, presentó un plan de iniciativa de paz regional que incluye el reconocimiento de Israel como un Estado judío y una renovación de conversaciones con los palestinos con el apoyo de los países árabes. El rey Abdallah II de Jordania y el presidente egipcio Abdel Fattah al-Sissi también estuvieron presentes en esa reunión. Netanyahu rechazó la propuesta de Kerry y dijo que tendría dificultades para conseguir que sea aprobada por su coalición gobernante.
Transcribimos un artículo de Raviv Drucker, uno de los periodistas más respetados y comprometidos del periodismo político israelí, comentando el artículo antes mencionado.

La importante primicia de Barak Ravid hace resaltar aún más el logro más significativo de Benjamín Netanyahu. En sus ocho años de gobierno casi nunca hizo nada en relación a los palestinos, más allá de decir un montón de palabras bonitas; y sin embargo, se las arregló para convencer a la opinión pública israelí, incluyendo a aquellos que se autodenominan líderes del bloque de centro-izquierda, de que no hay ninguna chance de llegar a una solución permanente (con los palestinos). Yair Lapid sostiene esto e Isaac Herzog y la gran mayoría de aquellos que lo votan están convencidos de ello. La cómoda tesis israelí, tan antigua como el país mismo, de que no hay un socio con quién negociar, sigue primando.
¿No es que Barak les ofreció todo en Camp David? (Eso son tonterías y hoy en día él mismo sostendría que son tonterías, sin dejar de reconocer la responsabilidad de Arafat por el fracaso) ¿Y Olmert, que a los palestinos les ofreció todo? (después de haber renunciado, en tanto sus dos sucesores potenciales declararon que no estarían obligados a aceptar sus propuestas) siendo que ellos (los palestinos) rechazaron todas las ofertas.
Ahora resulta que Netanyahu recibió de John Kerry la versión refinada y perfecta de la Solución de dos Estados. Si sus intenciones hubiesen sido serias, lo tendría que haber besado. (La propuesta de Kerry) implica el reconocimiento de Israel como Estado judío, con el apoyo egipcio y jordano, la formalización de un Estado palestino desmilitarizado, intercambios de tierras (que en la práctica significa mantener los bloques de asentamientos) y la solución del problema de los refugiados sin dañar el carácter del Estado, o sea eliminando el derecho al retorno de los palestinos y todo esto en el marco de un acuerdo y con el apoyo del rey de Jordania y el presidente egipcio.
¿Escenario de ensueño de Netanyahu? Más bien su pesadilla. Netanyahu no ha dicho que sí, pero con sabiduría tampoco dijo «no». Como es costumbre en él murmuró lo difícil que es para él enfrentarse a la coalición y fue a pensar sobre esto un poco más, demostrando una vez más que no está claro si hay un socio palestino para esta solución, la única solución que tal vez pueda calmar el conflicto entre los pueblos. Lo que queda claro, es que en los últimos ocho años no hubo un socio israelí.
Luego de publicado el artículo, muchos piensan que se ha sido injusto con el presidente de la oposición. ¿Quizá tenía una razón real para entrar en el gobierno de Netanyahu y no sólo lo movía el deseo de salvarse a sí mismo mediante la firma del Ministerio de Asuntos Exteriores? Sólo hay una cosa que se olvidaron de considerar los que ahora se disculpan. ¿Cuál es el motivo por el cual se perdió esta oportunidad? ¿Por qué Herzog dijo “no”? La oportunidad se perdió debido a que Netanyahu la rechazó. Él nunca se pone de acuerdo porque no quiere / no es capaz de aceptar esta solución.
Después de ocho años, bien podría haber avalado la propuesta de Kerry, no hay en ella nada nuevo. Pero él no lo avala. Herzog y John Kerry en esta ronda, y Tzipi Livni y Shimon Peres en rondas anteriores tratan de jugar a las damas con el ajedrecista Netanyahu. Él pierde el tiempo en forma genial, les vende hermosas palabras, les tira una cuerda y otra más, con la esperanza de que Abu Mazen mate el proceso antes que él mismo lo haga. A veces esto funciona, como funcionó con Tzipi Livni. A veces funciona menos, como en el caso del canal de conversaciones que Shimon Peres trató de gestionar. Pero sea como fuera, Netanyahu puede confiar en que los jugadores de damas no van a sacar a luz el secreto de las negociaciones.
Ha pasado casi un año desde la reunión cumbre que fue sacada a luz recientemente. Kerry no dijo nada, así como tampoco el presidente Obama lo hizo. Herzog sabía y se mantuvo en silencio e incluso Sissi y Abdallah quedaron en silencio. No había ninguna razón verdadera para guardar silencio. Ningún proceso se hubiera detenido como consecuencia de ello, pero estamos hablando de gente seria, confiable, que resulta que se sienten comprometidos a mantener su secreto. Por otro lado Netanyahu, se siente obligado solamente a mantener su coalición.
Sigo pensando que Herzog no debería haberse embarcado en negociaciones tan humillantes. Él tiene suficiente experiencia con Netanyahu. Cuando Netanyahu le susurró el poderoso secreto, todo lo que tendría que haberle dicho es: “Bibi, yo estoy contigo, dile ‘sí’ a Kerry y estoy dispuesto a entrar con todo mi partido a la coalición sin pedir carteras ministeriales”. Eso es todo. ¿Qué sentido tenía empezar a negociar por puestos? ¿Para qué escribir un documento para delinear la legislación del gas? Herzog tenía que entender desde el principio que Netanyahu lo utiliza en un intento de perder más tiempo, eliminar las iniciativas unilaterales internacionales o las de los Estados Unidos y, finalmente echarle el “muerto” a él. Recordemos que al ser nombrado Lieberman Ministro de Defensa, la gente de Netanyahu dijo en forma desdeñosa que Herzog no había sido capaz de convencer a su partido (de entrar a la coalición). Para ellos es un buen argumento de por qué el primer ministro no trató de aprovechar la oportunidad de llegar a un acuerdo permanente del conflicto que tenía el potencial de cambiar la historia. Todo debido a Isaac.
Fuente Heriberto Winter, Facebook de J-Amlat.