El director eligió sus testimonios porque sus vidas están atravesadas por historias en las cuales hay un niño para ser buscado, para ser salvado, para ser rescatado. “Durante largos años la mayoría de los sobrevivientes del Holocausto se llamaron a silencio. Cuando, aproximadamente 50 años después comenzaron a hablar, sentí la necesidad de recoger sus imágenes y sus palabras. Un millón de niños judíos fueron exterminados, varios miles fueron salvados. Registro sus historias porque pienso que merecen ser conocidas y difundidas”, cuenta el director de Salvar al niño.