Disidencias respecto a los manejos del dúo Netanyahu-Barak

Saltan los fusibles de la seguridad

Bajo el predominio del Estado de Israel, la exaltación y veneración de la fuerza, la intransigencia y la seguridad representan, sin duda, una de las innovaciones más significativas a la escala de valores del judaísmo moderno. Si alguna persona se merece recibir condecoraciones por derechos de autor y sobre todo por haber logrado insertar definitivamente esta problemática creencia en la sociedad judía, ésta es, sin duda, el Primer Ministro Netanyahu. No en vano su postulación para la reelección en los próximos comicios se basa en la consigna: “Primer Ministro fuerte para un Israel fuerte”.
Por Daniel Kupervaser *

Sorpresivamente y de un ángulo inesperado, la sociedad israelí recibió un balde de agua fría que puede poner en duda esa idoneidad de sus admirados ídolos justamente como consecuencia de esas nuevas y enraizadas convicciones.
En una extensa y muy detallada entrevista, Yuval Diskin, el recientemente retirado jefe del Shabak, los temibles servicios de seguridad internos de Israel, dio rienda suelta de su posición personal en una crítica demoledora respecto del dúo Netanyahu–Barak como adalides de un Estado que ve en la seguridad y su belicosidad las condiciones básicas e irremplazables de su existencia. “Netanyahu teme, titubea y se escapa de tomar responsabilidades. Hay aquí una gran crisis de liderazgo, crisis de valores, hay un menosprecio total del pueblo. Tal vez piensen que soy un poco extremista. Yo les digo a ustedes: de cerca se ve mucho peor. Pueden tildar a Mahamud Abbas de saboteador de la paz. Yo les digo que es una mentira. Él no va a ser un interlocutor fácil para la paz, pero debemos reconocer la verdad: ¿somos nosotros un interlocutor fácil para la paz? Justamente después de tantos años en lo que batallé contra el terror y vi tanta muerte y masacres, hay un momento que es necesario hacer todo, pero todo, para encontrar el camino de la negociación y compromiso”.

Desde las oficinas tanto del Primer Ministro como del Ministro de Defensa se apresuraron a desacreditar las palabras de Diskin con el argumento de que: “Están totalmente desvinculadas de la realidad y son una expresión de frustración por no haber recibido el ascenso a Jefe del Mossad”.

Pese a la posición preferencial de ambos, el Primer Ministro y el Ministro de Defensa, un rápido vistazo de las posturas y declaraciones de prácticamente toda la cúpula de seguridad de Israel de los últimos años, incluyendo parte de la actual en funciones, nos permite apreciar un fuerte espaldarazo a las ideas básicas expuestas por Diskin: el camino de la fuerza, el desprecio de un compromiso de paz con los palestinos y el permanente hostigamiento en pro de un ataque como única solución para desbaratar las aspiraciones nucleares de Irán, tal como lo manifiestan Netanyahu y Barak, nos aleja de toda solución del conflicto, y muy probablemente complique seriamente, sino la existencia misma, al menos el destino de Israel como Estado democrático y judío.

Meir Dagan, quien cumplió la función de jefe del Mossad durante una década y se retiró un año atrás, declaró públicamente que: “Un ataque a las instalaciones nucleares de Irán no debería ser la opción preferida, tampoco la probable y únicamente la última”.
En la misma oportunidad, catalogó a ese posible ataque de Israel a Irán como “lo más estúpido que escuché”. En otra oportunidad, el mismo Dagan afirmó que en el año 2010 Barak y Netanyhau dieron la orden al Ejército y a los servicios de seguridad de prepararse para un ataque al reactor nuclear de Irán. Tanto él, como el general Ashkenazy, Jefe del Estado Mayor del Ejército, y Yuval Diskin, Jefe de los Servicios de Seguridad Internos, consideraron la decisión como un ardid de “robar una declaración de guerra”, y por lo tanto, desbarataron el intento por tratarse de una maniobra ilegal cuya consecuencia inmediata podría haber sido desatar una guerra de magnitudes impredecibles.

También Efraim Halevy, un antecesor de Dagan en la misma función en el Mossad, dio a conocer su opinión acerca de que en la situación actual lo mejor es “aceptar la realidad y analizar el reconocimiento a Hamas”.
Los camaradas de Diskin, los seis últimos jefes del Shabak, participaron de una película documental que ya está nominada en su categoría a la preselección del Oscar de este año. Todos ellos, que estuvieron a la cabeza de esta tan importante institución de la seguridad de Israel durante los últimos 30 años, coincidieron, cada uno a su manera, en la imperiosa necesidad de poner fin a la conquista territorial interminable y al dominio de otro pueblo. Uno de ellos llegó a comparar el ejército de Israel con el ejército alemán de la Segunda Guerra Mundial.

El general Amos Yadlin, quien al momento de su retiro dos años se desempeñaba como Jefe de Informaciones del Estado Mayor del Ejército, declaró recientemente que: “Israel debe tomar el destino en sus manos. Es necesario poner de inmediato sobre la mesa de negociaciones una propuesta de constitución de un Estado Palestino. De otra manera estamos perdiendo el mundo”.

Sin que sus palabras fuesen citadas textualmente, todos los medios insisten en publicar el trascendido del desacuerdo del Jefe del Estado Mayor del Ejército en funciones, Beny Gantz, con el Primer Ministro respecto de los planes de ataque a Irán. Inclusive, hay quien sostiene que las funciones se invirtieron: Netanyahu actúa como Comandante en Jefe del Ejército y Beny Gantz como estadista.

La realidad nos demuestra que los fusibles de la seguridad están saltando uno tras otro, pero los sondeos de opinión prueban que la gran mayoría de ciudadanos de Israel insiste en permanecer flemática en todo sentido. Así como continúa indiferente ante la discriminación y el despojo de sus ingresos y bienes por las políticas económico-sociales del gobierno de Netanyahu, de la misma manera, prosigue embelesada por consignas de seguridad, belicosidad e intransigencia de alto contenido visceral pese a que fueron puestas en ridículo por una larga lista de los más altos funcionarios encargados de la materia.

* daniel.kupervaser.com