Turquía fue siempre un aliado estratégico de Israel en Medio Oriente, tanto es así que medió en las negociaciones de paz entre Jerusalén y Damasco. Además se crearon alianzas militares y económicas y una gran cantidad de turistas pasaban sus vacaciones en varias ciudades de ese país.
Pero en los últimos tiempos la relación se vió deteriorada, basicamnete por el caso del abordaje al barco turco Mavi Mármara que pretendía romper el bloqueo naval a la franja de Gaza. A partir de los cambios políticos regionales se vislumbra una oportunidad para que esta situación mejore.
Se sabe que tanto el presidente Shimon Peres, como el ministro de Defensa Ehud Barak, apoyan esta postura aunque aún no se han confirmado reuniones con el ministro de Asusntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu.
Por su parte Estados Unidos también avaló una posible mejora en las relaciones entre ambos países y alertó a los organizadores de la flotilla que cualquier intento de romper el bloqueo naval de Gaza sería considerada una «provocación».
