El presidente de la DAIA -por pocos días más- Jorge Kirszenbaum tildó como de «contundente» la prueba sobre la que se basó el fiscal: «se confirmó todo lo que veníamos sosteniendo sobre la responsabilidad directa del Estado de Irán y del grupo Hezbollah», dijo.
Kirszenbaum anunció además que cuando el juez Rodolfo Canicoba Corral pida la captura internacional de los imputados, la DAIA solicitará al Gobierno argentino que tome las «medidas adecuadas» como, por ejemplo, «una declaración contundente respecto del estado de Irán en la ONU y en los demás foros internacionales».
Con el mismo cariz hablaron los familiares reunidos en la agrupación (alineada con el oficialismo) Familiares y Amigos de las Víctimas del Atentado cuando le solicitaron a Canicota que adopte «con urgencia» las órdenes de captura y que no encuadre el atentado «sólo como una agresión de tipo antisemita contra la comunidad judía de la Argentina, sino como una agresión de un país a otro país».
La AMIA, a través de su presidente, Luis Grynwald en declaraciones a radio Rivadavia, afirmó estar «muy conforme» con el dictamen emitido por la Unidad Fiscal que investiga el atentado. También aclaró que “esto no es la culminación de la investigación del atentado sino que es una punta, una luz en el túnel que se ve. Falta saber qué pasó en Argentina, qué pasó con la conexión local», finalizó Grynwald.
Lo que se dice, casi casi una confianza ciega, la misma que la dirigencia tuvo en el ex juez Juan José Galeano.
