«Continuaremos exactamente con lo que estamos haciendo de momento», fue la respuesta del embajador de Israel ante la ONU, Dan Guillerman, al pedido del secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, de un «cese inmediato de las hostilidades».
Israel, de este modo, rechazó el pedido a un cese del fuego. «Estoy más molesto por lo que no ha dicho, que por lo que ha dicho. Ha omitido la palabra terrorismo, que es el origen del sufrimiento al que está sometido la población de El Líbano», indicó Guillerman minutos después de las declaraciones de Annan.
«Un cáncer puede ser derrotado únicamente si se lo vence por completo», continuó el embajador israelí, y acusó a Annan de haber dejado afuera de su discurso tres palabras claves en el conflicto actual: terrorismo, Irán y Siria.
«Sin hacer algo contra el terrorismo, no habrá un fin de las hostilidades», sostuvo el diplomático israelí.
Por su parte, el embajador de Estados Unidos ante la ONU, John Bolton, manifestó que antes de un alto al fuego es necesaria una transformación profunda en la región.
Según Bolton, Estados Unidos rechaza un inmediato cese el fuego como «demasiado simple», y añadió que negociaciones entre el gobierno y un «grupo terrorista» como Hezbollah tienen poco sentido.
Francia, por su parte, considera que ya es tiempo de un llamado oficial del Consejo de Seguridad por un cese el fuego entre Israel y el Hezbollah.
El embajador francés ante la ONU y actual presidente rotativo del Consejo, Jean-Marc de la Sablière, le presentó al Consejo propuestas oficiosas para una resolución al respecto.
