Israel: "Guardián de Murallas"

La misma guerra con otro nombre

A fines de diciembre del 2008 tuvo lugar "Plomo Fundido", un amplio operativo militar desplegado por Israel como respuesta al insistente ataque con proyectiles de mortero por parte del Hamás y grupos paramiltares yihadistas desde Gaza. El blanco de aquellas agresiones era el sur de Israel, con particular énfasis en el Neguev Occidental.
Por Moshé Rozén, desde Kibutz Nir Itzjak, en la frontera con Gaza, Israel.
Kibutz Nir Itzjak

Los niños de mi kibutz y las otras poblaciones de nuestra región pasaban sus días –y, principalmente, sus noches- en un refugio a prueba de misiles.
La televisión israelí registró la vivencia de aquella «infancia bajo fuego».
Eso fue a fines de 2008 y comienzos del 2009.
Pensamos que sería nuestra última pesadilla.
Pero en noviembre del 2014, las provocaciones bélicas del «Hamastán» dieron pié a otra movilización militar israelí: «Pilar Defensivo». Otra vez ataques de Gaza, represalias israelies, veganzas islamistas, Israel bombardea…un cíclico ritual de sangre.
No llegaron a cumplirse dos años de aquel enfrentamiento, en julio del 2016, amanecimos con «Márgen Protector», otro operativo de réplica a las amenazas de Hamás, a los misiles que impactaron en Sderot, los túneles del terror.
Los nombres, los pilares de sangre y plomo cambian, pero es una misma guerra, igual terror.
Pasaron 12 años del «Plomo Fundido». Los chicos que en aquel momento estaban en el jardín de infantes ya terminaron el colegio secundario.
Doce años de juego y aprendizaje compartido en nuestros campos de flores y de trigo, pero –también- doce años interrumpidos por sirenas de alarma, búsqueda de refugio: búsqueda de respuesta.
Respuesta para Israel y para Gaza.
Gaza, la franja de Gaza, dos millones de habitantes en menos de 400 kilómetros cuadrados.
Gaza, hijos y nietos de palestinos que perdieron sus hogares y sus sueños en otras guerras, anteriores a las de este siglo.
Gaza, sumergida por un islam fundamentalista e intansigente en la peor miseria y el mayor caos.
Además de amparo contra misiles y cúpulas de hierro, Israel, aquellos niños del 2009, sus padres y abuelos, buscan respuesta
Respuestas que no sean las del fúsil y el cañon.