Covers con historia

Ivri Lider canta “Bo”, de Rita

Muchas veces, la música pop arrastra cierta mala prensa frente a otros géneros musicales como el rock y el hip hop, más asociados a las problemáticas sociales. Pero también, digamos todo, muchas veces el rock y el hip hop caen por arrastre en fórmulas misóginas, las cuales el pop sobrelleva con mayor naturalidad hacia mejores puertos. En el pop hay lugar para todes. Y Bo, el clásico de Rita, en la versión de Ivri Lider, es un buen ejemplo de esta sensibilidad.
Por Leo Naidorf

La década del ‘80 permitió en Israel el ingreso del pop al mainstream musical, luego de unos primeros pasos a fines de la década anterior. Fuera de los Beatles y los Rolling Stones, los nuevos héroes mundiales que asomaban eran Madonna y Michael Jackson. Canciones pegadizas con cierto aire de marginalidad en los personajes y en las letras, entremezclados con el glamour que fue la marca de esos años.

Rita

En Israel un joven músico y productor musical, nacido en los Estados Unidos, se ponía al frente de esta renovación desde su trabajo en la composición, musicalización, arreglos y producción en estudios de grabación. Rami Klainstein representaba una generación que no arrastraba cuentas pendientes con el pasado político y militar del país, sino que buscaba imprimirle a la industria musical israelí el estilo y la calidad de grabación que podría insertar a los artistas locales en una escena más internacional.
La artista insignia de Klainstein fue su propia pareja, Rita, una artista nacida en Teherán que emigró a Israel junto a sus padres en 1970. Con una voz inconfundible y privilegiada, se desarrolló en paralelo a otra artista nacida en Medio Oriente, Ofra Haza. A diferencia de esta última, Rita se volcó al pop más internacional, y alcanzó su primer pico de popularidad y de ventas en 1988 con el disco Yemei Hatom (Los días de inocencia), que incluye como nota de color una versión en hebreo del adaggio del Concierto de Aranjuez. La popularidad y el prestigio de Rita crecieron a tal punto de ser la elegida para interpretar el himno israelí en la celebración de los primeros 50 años del Estado de Israel, cuando el Primer Ministro ya era Biniamin Netanyahu…

Ivri Lider

El corte de lanzamiento de ese disco fue el tema homónimo, un clásico absoluto. Sin embargo, otro de los temas que logró hacerse de un lugar en el inconsciente colectivo fue el que abre la edición: Bo (Ven).
Escrito por Miri Fingenboim y musicalizado por el propio Klainstein, el tema tiene una particularidad que se percibe con más detalle en el idioma original. La voz protagónica le habla a un varón, invitándolo a sacar a la luz una relación oculta. En la recepción original de este tema primó la literalidad heteronormativa, vale decir, la ingenua historia de una parejita joven luchando por su destino.
Luego de una intro que bien podría haber acompañado un tema de Cindy Lauper, la primera estrofa arranca: “Vamos a dispersar el efecto de la niebla. Vamos a pararnos en la luz y no en la sombra. ¿Hasta cuándo seguiremos escapando en juegos de poder? Tenés permitido llorar, cuando algo se rompe en tu interior”.

Cuentan las historias que para el compilado Avoda Ivrit 2, en el que artistas israelíes reversionaban clásicos locales, se le encargó el cover del tema Bo al nuevo ícono del pop israelí, Ivri Lider, cuyo tecladista era el aún poco conocido Idan Raichel. Finalmente, se publicó otra versión de Lider del tema Radio Ramallah, de Yehuda Poliker.

El destino quiso que la versión grabada, pero olvidada, de Lider corriera mejor suerte que en su diseño original. Fue elegida como tema principal de la película Yossi & Jagger, de Assi Dayan, que narra la historia de amor homosexual entre dos soldados del ejército israelí.
Y entonces, la versión edulcorada de los ochenta se volvía un himno por la libertad sexual al mejor estilo Soy lo que soy, en la voz de un Ivri Lider que también había abierto su identidad homosexual para transformarse en el mejor baladista queer de Israel.

Y en un parlante multicolor resuena el estribillo potente en la voz de Lider (y del público eufórico): “Contame un poco sobre los momentos de miedo. Es mucho más fácil temer juntos. Y cuando afuera soplen vientos fríos, te enviaré un fuego caliente. Un día, quizás, dejes de correr por las oscuridades del alma”.