Invasión a Irak:

Las cifras del drama

En la madrugada del 20 de marzo de 2003, las tropas estadounidenses invadieron Irak. Desde entonces, se ha desatado una ola de violencia que crece día a día según las cifras que se van conociendo. Mientras en el mundo continúa el repudio a la invasión y en Irak temen una guerra civil, Bush se mantiene firme y asegura que saldrá "victorioso", aunque los resultados contradicen su optimismo. Estas son las cifras del drama:

Un 20 de marzo de 2003, cuando el amanecer despertaba a Bagdad, las tropas aliadas (Estados Unidos y el Reino Unido) lanzaban unos 40 misiles ‘Tomahawk’ contra objetivos seleccionados de la capital, con el fin, según confirmó el Pentágono, de «decapitar» a los líderes iraquíes. Una hora más tarde, George W. Bush, se dirigía a su país: «No esperamos otro resultado que la victoria».
Ya se cumplen 3 años de aquel primer ataque aliado sobre Irak, el inicio de la invasión que en 3 meses derribó a Saddam Hussein, pero la violencia y las muertes se han ido incrementando.
Estados Unidos mantiene desplegados unos 130.000 soldados en el país árabe, donde ya han muerto más de 2.300 militares estadounidenses desde el comienzo de la guerra.
Según la organización, ‘Iraq Body Count’, las víctimas civiles estimadas son entre 33.679 y 37.975. Ello se explica porque las cifras proceden de un sondeo amplio de las informaciones de los medios de comunicación.
Pero además, según cifras actualizadas con los datos de la morgue de Bagdad para 2005, el número de víctimas civiles no ha hecho más que aumentar desde el 1 de mayo de 2003, fecha en que Bush, anunció el fin de las principales operaciones militares.
Desde el 1 de mayo de 2003 hasta el 19 de marzo de 2004 murieron 6.331 personas; desde el 20 marzo de 2004 hasta el 19 de marzo de 2005 murieron 11.312 civiles y, desde el 20 de marzo de 2005 hasta el 1 de marzo de 2006 murieron 12.617 civiles, lo que hace del último año el más sangriento desde que comenzó la guerra.
De hecho, según estas cifras, el número de muertos pasó de 20 diarios en el primer año de la posguerra oficial, a 31 en el segundo y 36 en el tercero. Las cifras tienen en cuenta no sólo los muertos en ataques, sino también las de la criminalidad producto de la mayor inseguridad.
Estas cifras no incluyen, precisa la organización en su web, las víctimas de la llamada ‘guerra de las mezquitas’ tras el atentado que destrozó la Mezquita Dorada de Samarra el 22 de febrero y que ha provocado una ola de atentados y acciones sectarias entre sunitas y chiítas en el país y se ha cobrado la vida de más de 500 iraquíes.
La caída gradual en los últimos meses del apoyo de los estadounidenses a la guerra en Irak es uno de los principales factores en el descenso de popularidad del presidente George W. Bush.
Frente a esto, Bush conmemoró al aniversario tratando de promocionar los esfuerzos para construir una democracia en Irak. Evitó mencionar la continua violencia diaria y no pronunció la palabra «guerra».
«Ponemos en práctica una estrategia que llevará a la victoria en Irak», destacó Bush en una breve declaración a los periodistas en la Casa Blanca.
Además, Bush señaló que su estrategia en ese país surte efecto aunque las «horrendas imágenes» de televisión digan lo contrario.