El informe, preparado por el director de la AIEA Mohamed ElBaradei para un encuentro de la junta de gobernadores de la agencia previsto para el 6 de marzo, podría ayudar a determinar qué medidas tomará el Consejo de Seguridad de la ONU con Irán.
Luego de un encuentro el 4 de febrero, la junta de la AIEA ya informó sobre el tema de Teherán al Consejo de Seguridad, pero dijo que esperaría hasta el final del encuentro de la semana próxima para tomar otras medidas.
El informe de 11 páginas contiene pocas revelaciones que puedan incrementar las sospechas de que Irán oculta un programa de armas nucleares.
En cambio, enfatiza que una investigación de más de tres años aún no ha revelado «ningún desvío de material nuclear a armas nucleares o a otros dispositivos nucleares explosivos».
Sin embargo, declara que debido a la falta de cooperación por parte de los iraníes, la AIEA no puede «determinar que no existen materiales nucleares o actividades no declaradas en Irán».
Se trata de una admisión de la agencia de que no puede establecer si Irán está ocultando aspectos de su programa nuclear que está obligado a reportar a la agencia de la ONU, según establece el tratado de no proliferación de armas nucleares.
El informe filtrado a la prensa muestra que Irán insiste con enriquecer uranio en su territorio al poner a prueba una centrifugadora que convierte al gas uranio en uranio enriquecido. Irán habría colocado gas en 10 centrifugadoras y habría comenzado a enriquecer uranio entre el 11 de febrero y el 15 de febrero pasados.
Además, se indicó que Irán comenzó con el mantenimiento de otras 20 centrifugadoras reflejando su determinación de continuar con el enriquecimiento.
